El dios de los cristianos, Dios de mi infancia, no hace el amor. Quizás es el único dios que nunca ha hecho el amor, entre todos los dioses de todas las religiones de la historia humana. Cada vez que lo pienso, siento pena por él. Y entonces le perdono que haya sido mi superpapá castigador, jefe de policía del universo, y pienso que al fin y al cabo Dios también supo ser mi amigo en aquellos viejos tiempos, cuando yo creía en Él y creía que Él creía en mí. Entonces paro la oreja, entre la caída del sol y la caída de la noche, y me parece escuchar sus melancólicas confidencias.

Eduardo Galeano.

domingo, 22 de mayo de 2011

Lo que en verdad aprendo #5: La Vorágine de J.E. Rivera

A veces, cuando analizo las obras, se me cae alguna idea....:



En La Vorágine la relación del hombre con la selva tiene un trasfondo social: para hacer de la selva un escenario de explotación o un bien de producción, se la debe “domesticar”, y mientras que la selva se domestica, el hombre se “salvajiza” deshaciéndose de las normas morales en las que fue formado para entregarse a la mera lucha por la supervivencia. 


 [imágenes de ELOY AÑEZ MARAÑON (Pintor boliviano)]