El dios de los cristianos, Dios de mi infancia, no hace el amor. Quizás es el único dios que nunca ha hecho el amor, entre todos los dioses de todas las religiones de la historia humana. Cada vez que lo pienso, siento pena por él. Y entonces le perdono que haya sido mi superpapá castigador, jefe de policía del universo, y pienso que al fin y al cabo Dios también supo ser mi amigo en aquellos viejos tiempos, cuando yo creía en Él y creía que Él creía en mí. Entonces paro la oreja, entre la caída del sol y la caída de la noche, y me parece escuchar sus melancólicas confidencias.

Eduardo Galeano.

lunes, 24 de noviembre de 2014

Sirenas y dragones




No viste conmigo ni las sirenas ni los dragones
(yo la sirena, vos los dragones)

Me debato entre las mujeres del bosque
la culpa
el miedo
la soledad
hicieron mella en mí

Estas heridas
no se cauterizan con fuego.

Lamiéndome



I
Te entregué mi piel
más fresca
que el alba
hice correr
mi mente y mi alma
a tu par

II
Me intoxicaste con tus humos dulces
me diste de tomar
el hollín de tu lengua
y no me pude escapar

III
De tu palabra perversa
no pude desatar los nudos
de tu lógica perfecta
no pude sacar ni una puta canción

VI
Mientras me lamo las heridas
resplandecientes
el pecho todavía me duele
todos los relojes del mundo
se estallaron aquí

La cholita


Yo quería la de Cusco buen día
con una ciudad grande
y un sol naciente
y todos los colores que se despiertan cuando amanece
pero me dieron
la de la cholita
sentada
abajo
a la izquierda
a punto de caerse del cuadro
en blanco y negro
el fondo tenía
casitas bajas
techos de chapa
y unas pintadas
algo sobre la alfabetización
"es de una artista local"
y así me sentí
(yo)
entendí
que si quería la de Buendíacusco
debería ir a sacarla
yo misma.

Helena



¿De dónde salieron estas murallas que me tapan hasta la frente?
¿Quién levantó estos tapiales que me aplastan las sienes?
(Llegan tan alto que ni siquiera puedo oírme)

¿Quién construyó este fuerte que bordea todas mis costas?

Quietita espero
que vengan mil naves
aplasten los paredones
me rompan al medio
e incendien mi ciudad

jueves, 13 de noviembre de 2014

I

Y me robé tus calzones
fue sin darme cuenta
sin querer
metí tus calzones en mi cartera
sin que vos lo vieras
sin que yo lo viera
sin que tus chihuahuas lo vieran
Devolveme mis calzoncillos, nena
me dijiste
y tu voz sonó como de un hombre mayor

II

Podrías quedarte
ya que te sentís mal
(cuando me siento mal, lloro; sobre todo frente al farmacéutico)
no ir a entrenar y quedarte a comer conmigo
"Ah no,
pedime que falte al laburo
(que me pidas que falte al laburo,
te digo)
pedime que falte a la facu
(te estoy pidiendo
que me pidas que falte a la facu)
pero tela no se negocia"
te dije.

III

Y ahí lo vi
no era un misil
ni estaba en mi placar
era su inicial
en un calzoncillo
en mi cartera
cagándose de risa
de mi frase
"Por mí no te preocupes,
yo tengo todo bajo control"
Loca de mierda.